miércoles, 27 de febrero de 2013

Y QUÉ!



Y QUÉ!


Que el sistema no protege sí explota y persigue al individuo,
es manifiesto.

Que el ciudadano y el aldeano no tienen armas no hay defensa
contra el sistema sólo rabia contagiosa acumulada,
es consecuencia.

Que en la guerra estado población el estado siempre vence
por traidor y por tirano,
es constatable.

Que al pueblo y la ciudad no le queda otro recurso que la revuelta
y las armas y tomarse la justicia por su mano
para liberarse del estado que es represivo es tramposo es asesino,
no es discutible.

Que al estado derribado sustituye otro que es distinto el primer día
que al segundo del día segundo ya es lo mismo ya es igual pero peor
ya vienen los poderes del nuevo y viejo estado
quieren vestir la puta venganza de muy señora su justicia
nuevos nombres en la lista de desaparecidos viejos métodos
son clásicos de todo estado que no protege sí persigue
explota y mata al individuo,
no es remediable.



© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

CIERTOS SON LOS FALLOS




CIERTOS SON LOS FALLOS


No afirme señor juez que los hechos se han esclarecido.
Que la verdad salió a la luz y por los actos hay un claro culpable.
No limpie su conciencia de deberes no cumplidos.
De errores pasados.
No desande sus tropiezos que el pasado no se cambia,
y las malas decisiones no son buenas por tratar de remediarlas,
tras nueva y ejemplar sentencia.

No se esfuerce señor juez en hacer cumplir la ley.
Que las leyes rolan como el viento al calor de nuevos tiempos.
Con la prisa de la última tormenta mediático política.
Falle lo que falle señor juez
en breve lapso quedará todo obsoleto.

No admiro su oficio ni envidio su destino:
no es usted ni su conciencia quien hace justicia es el sistema
que se venga.
Para todo hay un culpable y si no lo hay se lo inventa.

No se apure señor juez en pronunciarse:
falle lo que falle en este caso como en todos,
será un fallo.

¿Y qué vida es esa que se vive fallando?



© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

martes, 26 de febrero de 2013

POETAS CALLEJEROS



POETAS CALLEJEROS


A la calle han salido los poetas;
se han tirado.
A la calle armados con papel y lápiz,
municionados con letras,
protegidos con escudos de cartón.

A la calle se han lanzado,
arrojado,
entusiasmados con la fuerza de la razón.
Motivados con la esperanza de un cambio para todos necesario.
Temerarios los poetas que piensan vencer soltando granadas
de palabras al contrario.
Al contrario son las cosas que a las palabras certera bala las detiene.

Avanzan los poetas con la camisa abierta,
el pecho abierto la ilusión despierta.
Ocupan plazas y calles hasta llegar a la muralla,
Construida año a año piedra a piedra soldado a soldado
por el poder a poetas y al resto arrebatado.
El mismo que hoy concentran cuatro manos.

Se topan los poetas con un muro de soldados:
fila tras fila tras fila de hombres y mujeres bien armados
con fusiles cargados de plomo.
¡La palabra es más certera que las balas!
-grita algún poeta más valiente que todos los valientes.

Se olvidaron esta vez de los claveles
y en la bocacha de los fusiles no cuelgan flores rojas.
Sí bayonetas afiladas, dispuestas
a teñirse de rojo ensangrentadas.
Un disparo de bala que no estaba perdida alcanza al poeta más valiente,
más ingenuo.
Le abre el pecho abierto por donde la camisa estaba abierta.
El ejército de obediencia debida y reprimida
carga en masa contra la masa desconcertada de poetas.

Ya están rojos, de sangre no de flores,
los fusiles.
Pisoteadas cubren el suelo las palabras.
Muertos yacen los poetas.
Ocupa las calles el ejército.
De ellas se adueña el silencio y el miedo.

Abandonados a su destino han sido los poetas
por todos los que desde sus casas tras las cortinas espían y esconden.
Testigos del sacrificio,
vencidos por el miedo,
derrotados por la cobardía.

En los pueblos, no hay mayor enemigo.


© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

jueves, 21 de febrero de 2013

DECESO SEGURO




DECESO SEGURO


He decidido irme de viaje. Lo que llaman cambiar de aires.
Cuentan que abre la mente y genera,
a veces falsas,
nuevas expectativas.
Que esta rutina diaria, sin sorpresas ni sobresaltos,
me tiene tan aburrido como la noria a la mula.
O la jaula al canario.

Qué hacemos sino otra cosa
que dar vueltas a la noria dentro de esta jaula de oro.
De oro que nos creíamos porque el oro se lo llevaron.
Y nos han encerrado con plomo:
es más pesado y mata más rápido.

Por esto he de cambiar de aires
hacia un lugar menos viciado.
Aunque la cosa no estaba fácil, ya he hecho mi selección:

Coche de alta gama mesa de firmas flores naturales
recordatorios derechos en tierra columbario
urna nicho lápida.
Ya metidos en gastos quiero un todo incluido.
Con pulserita al cuello amarrada,
para no salir volando.

Me falta por elegir el arca,
va ganando adeptos la egipcia,
y la esquela de agradecimiento:

Dejaré un gran espacio en blanco.



© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

lunes, 18 de febrero de 2013

PASTILLAS CONTRA EL DESEO




PASTILLAS CONTRA EL DESEO


He inventado una píldora nueva.
Una droga extradura que arrasará como el crack
y matará como la heroína.
Qué mejor epílogo para ciertas vidas de pesadilla.

En breve la pongo en el mercado.
Primero clandestino luego mundial.
Mi droga es un producto sin edad:
espero tomarla durante años.

Concentrado de resignación sobre polvo de obrero.
Levadura rápida de desengaño, bloqueador neuronal de sueños,
extra de antídoto contra la ambición
y unas gotas da autoengaño.
Con todo lo anterior, de esto necesito cada vez menos.

Elaborados los comprimidos en un molde con forma de herradura,
para dar coces a la mala suerte,
los horneo en el fuego lento de la tolerancia a la frustración.
Combinando bien con alcohol y tomadas de dos en dos
en matarratas de alta graduación,
con mis tabletas podrás obtener una vida plena entre la mediocridad.
Sin dolor ni sufrimiento ni pelear por ello.

Tras un mes de tratamiento,
tan contento.




© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

EL ESCULTOR ERRANTE




EL ESCULTOR ERRANTE


Aplaudieron los asistentes al partido
las palabras del escultor bajo la alargada sombra de su galerista.
Inaugurada queda otra nueva exposición
en el centro de arte para vanguardias avanzadas.

Pasen ustedes a la vernissage:
coman lo que puedan beban lo que aguanten.
Por la lista de precios no pregunten que no la hemos traído.
La experiencia nos dice que no era necesaria:
a nadie le interesa la obra expuesta.
Sí para hablar de ella un cuarto de hora.
No para quedársela si se ha de pagar por ella.

Será esta otra exposición sin límites y abierta.
Sin límites definidos es decir indefinida esto es difusa.
Confusa. Nada clara poco concluyente bastante cara.
Abierta al futuro lleno de posibilidades
de opciones y ofertas para, al fin,
dar el gran salto.
Al vacío del fracaso al anonimato la desesperación del tiempo
que siempre se anda escapando.
Sin dejar nada a cambio.

La trampa del escultor es una trampa mortal:
ya no puede desandar el camino y volver a empezar
un nuevo destino.
Que nada tenga que ver con el arte ni se le parezca.

Ya no quiere seguir que no quiere luchar contra el mundo
que siempre es perder y además por ello
también pagar.



© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

CAMPO SANTO




CAMPO SANTO


Y pides a las buenas gentes del lugar
que apoyen esa causa tuya que no es tuya que es causa comunitaria.
Y los parias mal paridos peor alimentados
con la leche agria de burras desquiciadas
hacen causa común contra tu causa por creer que es sólo tuya,
con la furia controlada de las fieras enjauladas
y el valor de los que cara a cara siempre huyen.
Con la envidia de los que nada tienen salvo envidia
que para nada valen por eso todo lo quieren.

Y por ellos sientes asco.
Y por todos los que dicen apoyarte
desde el rincón más apartado de sus cuevas
a la tenue lumbre de unas brasas escondidas
ocultos de las miradas de envidiosos;
pero más ocultos están por cobardía.

A tu funeral no irán por miedo
a ser vistos en la posición de apoyar tu causa perdida.
Y también por estos sientes asco.
Aunque menos que por aquellos que a la vista de todos te sonríen
tapados tras sus máscaras de plástico
de este mundo de plástico y cartón.
Tanto te sonríen a la cara como te acuchillan
cuando confiado tú les das la espalda.

Y ni con aquellos ni con esos ni con estos
harás causa común en esta causa que no es tuya que es de todos.
Al final de la contienda verás que te has quedado solo.
Y aunque hayas ganado habrás perdido
pues nadie quiere que le vean a tu lado.

En lo alto de la colina y con la espada vencida
ves el valle de muertos y teñidos de sangre los arroyos.
Y si bien los muertos bien muertos están por ser tus enemigos
te preguntas si alguno de los vivos mereció tal sacrificio:
aunque lo juren sabes que no, que no serán nunca tus amigos.

Amarga es la derrota por vencido.
Como amargos son los gritos de victoria
por hipócritas.



© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

VALENTÍN VALIENTE





VALENTÍN VALIENTE


Él entra en el despacho con aplomo:
cuatro zancadas de seguridad, dos brazos de ambición.
Quiere para su vida algo mejor, si fuera posible,
un poco de amor.
Cada cual sobrevive según sus métodos: tira de marketing.

Hombre culto sano deportista responsable de mediana edad.
Apasionado de los viajes económicamente solvente.
Gusta del cine el teatro el ballet la ópera. Sin vicios.
No bebedor ni fumador ni jugador ni sobrinos ni hijos.
Amable simpático buen conversador.
Busca mujer de similares características. Para amistad y lo que surja.

Por la puerta lateral sale del despacho por la puerta principal entra ella.
Tranquila pero segura. Convencida pero sin prisa.
Meditada está la decisión largo tiempo;
que esta vida de soledad no hay cuerpo que la resista ni alma que la soporte.
Su triunfo profesional fue un fracaso sentimental.
De buen porte mente llena corazón vacío,
siempre falló en la seducción y dejarse hacerlo.
La agencia resolverá por ella.

Mujer culta sensible de mediana edad y estatura.
Atractiva sin excesos elegante sin pretensiones.
No cargas económicas ni familiares.
Muchos proyectos varios idiomas.
Amante del deporte y la naturaleza, aunque poco amada.
Gusta del cine el teatro la ópera y paseos por el campo.
Gusta también de encontrar un buen hombre para amistad,
pero mejor lo que surja.
Interesados contactar con la referencia.

A la agencia han ido ambos buscando el amor.
Quién sabe si el amor o el derrumbe.




© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

miércoles, 13 de febrero de 2013

MARCHAND




MARCHAND


Tu cara bonita de personaje seductor amable carismático
abrirá muchas puertas arrancará promesas, colaboraciones,
compromisos fugaces y entusiasmos agitados.

Tu sonrisa abierta tu fular al cuello tu abrigo de paño.
Tu traje Burberrys tus zapatos de 500$
hacen por ti las presentaciones.
Después tus manos cuidadas de trabajador sin daños
tu sonrisa fácil de conversador embustero
tus ojos azules de mirada lánguida que sin esfuerzo se sostiene
hacen el resto.

Y sin trabajo conquistas corazones y voluntades.
Con voluntad se entregan quienes en tus trampas caen.
Todo te dan que tú se lo pides.
Todo y más.

Y con los bolsillos llenos el botón repleto
el cuerpo de besos cubierto
por donde has venido huyes.

Con el silencio de un gato
La rapidez de un pájaro
La sinuosidad desconcertante, de un lagarto.



© CHRISTOPHE CARO ALCALDE


LAST EXIT



LAST EXIT


Muy señores vuestros que para vosotros sois todos extraños
con esta nota breve al margen me despido.
No quiero entreteneros ni que os crucéis en mi camino
que nada perderé por no veros como nada gané por haberos conocido.
Nada fuisteis nada sois nada seréis.

Abandono hoy este desierto de tierra muerta y huesos.
Huesos de muertos que sois vosotros huyendo del espejo.
Dejo por fin este lugar inhóspito y salvaje
que hace de la vida una pérdida de tiempo, una atonía.

Abandono ahora que puedo el cementerio en que moráis
como ratas por panteones y tumbas.
Refugios breves donde ocultáis vuestras miserias y mentiras.
Ruines sois como mezquinos y viles.
Para siempre dejo este lugar que es una vida muerta en vía muerta.

No me sigáis nada quiero de vosotros.
No vengáis a despediros ni me traigáis abrazos
o deseos de prosperidad y suerte.
En nada os aprecio ni tenéis que me interese.
En nada os creo.

Os dejo pues, malditos que sois y condenados que estáis
a seguir revolcándoos por el suelo entre traiciones y desolación.

Rica será la soledad del exiliado,
como pobre es permanecer a vuestro lado.



© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

A FIN Y DAD



A FIN Y DAD


No sé cuándo cojones vas a aprenderte este ritual
y dejar de presionar para hacer lo que quieres:
ahora un paseo ahora un salto ahora la comida en el plato.
Y siesta y vuelta a empezar.
Y cuando te aburres, a jugar:
aquí estamos todos para hacerte disfrutar.
Vamos a la playa, oh, oh, oh, oh. ¡Pues no!

Aquí no va nadie a ningún sitio que no hay tiempo para fiestas
y sí mucho trabajo.
Trabajo del que duele, del que no da beneficios,
ni es recompensado.
¿Alguna vez te preguntaste para qué estamos juntos?
Tú para ser feliz y bailar cada día una milonga distinta.
Yo para cumplir con la obligación de tocarte cada día
una milonga nueva.
Y después todas las mías,
que no son milongas pero sí condenas.
Alguna, perpetua.

No sé cuándo cojones vas a aprender que aquí se hace lo mismo
cada día aunque no guste.
Porque no gusta lo evitas al evitarlo ya lo hará el esclavo.
Y casi sin darme cuenta ya estoy en otra trampa de la que salir no puedo
aunque sepa cómo hacerlo:
hay que deshacerlo todo y reescribir el último capítulo, todo entero.

Que no quede una coma que repetirse pueda.
A la coma le siguen las frases y a las frases la historia y ya estamos igual.
Tú bailando tu milonga, yo,
tocando los mambos.
Mambo qué rico está, ¡pues no!

Se acabó el mambo la música la fiesta la compañía el teatro.
En adelante a joderse todos que al final,
eso de vivir,
no es otra cosa que pasar malos ratos.
Y el bueno, olvidarlo.



© CHRISTOPHE CARO ALCALDE

RECOGIDA DE BASURAS




RECOGIDA DE BASURAS


Hemos decidido pasar a la acción.
Basta ya de tanta pereza en el aula que más parece resignación.
Saquemos las escopetas que aquí se ha abierto la veda
para matar camaradas.
Sí, de esos que no dan nunca la cara.
Que alzan el brazo en alto cantando la internacional;
y estiran el brazo bajo para trincar el soborno
que ofrece el bribón adecuado.

De esos que son socialistas a gritos y capitalistas escondidos.
El doble yo de la doble moral de la doble vida de la doble paga.
Libertadores del pueblo con la sangre del pueblo y las armas del enemigo:
todo aquel que no comulga contigo.

Salvapatrias groseros oradores obscenos mentirosos expertos.
Embaucadores a tiempo completo.
Maquinadores en silencio asesinos a sueldo:
paga el lobby y el muerto.

La razón la pone cualquier ideal que asome da la bocamanga
de algún comensal indispuesto.
Que al banquete de investidura ha venido con invitación y reserva.

Por esto hay que pasar a la acción y vaciar de nobles la plaza.
Portavoces de gobierno autoridades civiles religiosas militares.
Gente VIP por vocación con varios puestos de representación.

Que entre la huelga de basureros y el miedo a perder el puesto,
no hay forma de que cambie nada.



© CHRISTOPHE CARO ALCALDE